18 de mayo de 2009

Me gustas en la cama

Tengo ganas de abrazarte, de entrar a esa librería eclesiástica y ser coqueto contigo, de tomarte de la mano y pasar nuestras tardes entre plazas y cafés.

Busco esos instantes de manos indecisas, de ceniceros llenos y de miradas furtivas que suplen al corazón de quien calla.

Necesito de tu caminata, de un beso sentido, de la ilusión desconocida que se torna en vino junto a la cama, y de tu cabeza descansando en la almohada.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

ESOS SENTIRES PODRÍAN
DELATARLO
DE-LETRARLO

Anónimo dijo...

Esos sentires podrían
delatarlo
deletrarlo

Carlos Gregorio dijo...

Me delatan las costumbres, las palabras, las miradas y los roces. De tarde y lluvia.

Me delato.