10 de marzo de 2007

M. G. J. G. G


Mujer
Generosa,
Justa
y
de
Gran
Gentiliza.

En el nombre llevas el suplicio, de un gran sacrificio que el destino te otorgó y que cargas sin ningún remilgo.

Tu mirada cubre cuál manto celestial a millones de hijos de la miseria y el dolor, protegidos por tu inmenso amor.

Justa es tu hermosura, que pareciera estuviera escrita en todas las Suras de un libro que guardo en un cajón.

Dos son los guerreros que se encumbren en enfrentamientos de razón y pasión, en guardia de la nación que es tu prodigioso corazón.

Y yo sigo leyendo tus letras en papiros secos, hasta que tenga arrojo para decirte cuanto te adoro.